lunes, 3 de enero de 2011

VICTORIA CON FATIGUITAS

El Sevilla Fútbol Club rompió en la noche de ayer la mala racha acumulada en la competición de Liga, donde habíamos perdido en las cinco últimas comparecencias, lo cual nos ha condenado momentánemente y esperemos que por pocas jornadas más, a la mediocre mitad de la tabla clasificatoria.

Ayer, con el estadio casi lleno, nuestro equipo venció al siempre difícil Osasuna de Camacho con un tanto de Kanouté a la salida de una falta magistralmente lanzada por el reaparecido Jesús Navas.

Vayamos por partes. El Sevilla afronta el partido de inicio con una intensidad y rapidez que nos hacía disfrutar a cuantos estábamos en la grada del viejo Nervión. Se sucedieron en los primeros minutos varias ocasiones casi todas ellas fabricadas por un electrizante Navas. Una pena no haber acertado pues nos hubiéramos ahorrado el sufrimiento posterior.

Incluso Capel, en una ocasión provocada por un error de la defensa rojilla, estuvo a punto de inaugurar el marcador. Tuvo que ser el gigante malí el que abriera la lata, pero con el paso de los minutos volvimos a las andadas y el equipo se mostró algo impreciso y nervioso. 
Romaric volvía a ser el que no queremos ver, desfondado físicamente, sin pedirla siempre como en el partido copero ante el Málaga, y con un Negredo ayer tembién en uno de sus aciagos partidos. Al menos la defensa ayer sí que no pasó demasiados apuros. Fue la línea que más me gustó ayer.

En lo positivo, sin duda la reaparición de Navas, que sin tener continuidad en el juego al acusar la inactividad, sí dejó constancia de peligro constante cuando el balón está en sus pies. Asimismo, la voluntad de agradar siempre de Dabo y el buen partido hasta su lesión de Fernando Navarro.

En lo negativo, otra vez el centro del campo en la zona de los mediocentros. Sin fuelle en la segunda parte Romaric y Zokora algo alocado y buscándose una innecesaria tarjeta que además es la quinta.

Sin duda, los mediocentros será la zona donde se insistirá más en el mercado de invierno. Ya dije en anteriores posts que con ese retoque y la recuperación definitiva de efectivos el equipo cambiará la cara.
También quería resaltar la excesiva tranquilidad de Manzano en la segunda parte a la hora de dar relevo a jugadores que estaban pidiendo el cambio por su desgaste físico. Entiendo que los cambios hay que hacerlos un poco antes, al menos en partidos como el de ayer, con un resultado tan incierto.

Lo más importante, los tres puntitos más para el saco, que biuena falta nos hacía. Ahora, a rematar en Málaga nuestro pase a cuartos de final. Saludos sevillistas.



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